Boda Hanami: Irene y Fede, una boda romántica y muy elegante
La boda de Irene y Fede, se caracterizó por su elegancia y buen gusto, fruto de la dedicación que puso Irene en todo. Así que cuando los novios decidieron contar con nosotros, cuidamos hasta el más mínimo detalle, para que todo fuera como ellos lo habían imaginado, y creo que al final lo conseguimos, como podréis ver a través de este reportaje.
Como ocurre en la organización de cada boda, fueron muchos los meses de preparación, reuniones, llamadas de teléfono o visitas al lugar de celebración. Pero centrándonos en el gran día, todo comenzó en las fabulosas habitaciones del Hotel Casa 1800 donde Irene junto con sus hermanas y madre comenzaron a prepararse. La novia llevó un maravilloso vestido de Laura Monge, acompañado de zapatos en color nude con apliques dorados de Keli & Salo y un precioso ramo de peonías y flor de cera, de Lucía Cuadros.
Momentos de relajación, risas y anécdotas, que supo recoger a la perfección el fotógrafo José Reyes de principio a fin.
Mientras tanto Fede, nervioso y muy contento esperaba a las puertas del templo del Sagrario en pleno centro de Granada. A las 19 horas llegaba la novia junto a su padrino, en un flamante Jaguar MK2.
Novio y madrina, esperaban a pie del altar a Irene y su padre. Acompañado todo ello por la música de los chicos de Tres Corcheas. La decoración de la iglesia, muy sencilla y elegante con centros de liliums, lisianthus, astromelias y paniculata todo en color blanco.
Acabada la ceremonia, todos los invitados se dirigieron al cortijo Alameda a disfrutar de una velada romántica y muy especial bajo el cielo estrellado.
Ya, desde la entrada al cortijo, 80 farolillos colgantes iluminaban la pérgola para la recepción de los invitados. Música de jazz, y la deliciosa comida del cortijo, fueron el complemento perfecto para el comienzo de la noche. Unas letras vintage realizadas por el propio novio, hacía de improvisado photocall. Pero Fede, todo un manitas, se encargó también de realizar el cartel de bienvenida, la barra de quintos, y el marco para el seating.
Antes de pasar a la cena, todas las invitadas tenían unos protege tacones para que pudiesen estar cómodas andando por el césped. El jardín no podía estar más bonito con la iluminación de la pérgola de luces, y mesas decoradas de forma muy sencilla, con velas y flor blanca. Meseros, menús y seating todo a juego, junto con unas cartas de los novios dedicadas a sus invitados.
Hubo dos momentos muy especiales, cuando Irene felicitó a una de sus mejores amigas con una tarta con una foto de ambas, y con la entrega de su ramo a otra amiga, con la canción I say a little prayer.
La fiesta continuó con el primer baile de los novios, y con un simpatiquísimo vídeo que preparó la familia y los amigos, imitando al popular programa de Pasa Palabra.
Además todo se completaba con un fotomatón, que sin duda, fue el rey de la madrugada, y una mesa de dulces que hizo las delicias de pequeños y mayores.
Y esto fue todo, un día mágico junto a Fede e Irene. Una boda que siempre recordaremos y que espero que os guste tanto como a nosotros. ¡Enhorabuena chicos, gracias por confiar en nosotros y que seáis muy felices!
Fotografía: José Reyes